Cuando llega el resumen bancario, es posible realizar un procedimiento administrativo llamado conciliación. Éste consiste en chequear que la información registrada en el sistema coincida con lo que informa el resumen del banco.
Digamos, por ejemplo, que indicamos una fecha de realización para un cheque, pero la persona va a cobrarlo más tarde. Situaciones como esa pueden aclararse mediante la conciliación.
El procedimiento es sencillo. Primero, creamos una conciliación por período (generalmente un mes) y banco.
Posteriormente, presionando «Conciliar», el sistema traerá los movimientos del período indicado más los movimientos no conciliados de períodos anteriores (recordemos el ejemplo del cheque cobrado en otra fecha). Al seleccionar el comprobante, podremos marcar la fecha de realización real del movimiento, en caso de que difiera con la cargada.
Finalmente, en Archivo > Grabar registramos la conciliación.
En resumen: ¿cuál es el objetivo de la conciliación? Que en el sistema quede reflejado lo mismo que vemos en el resumen bancario.